Lo primero que hay que decir de Bailarina, o de Eve, el personaje que encarna Ana de Armas, es que no tiene nada que envidiarle a John Wick, ni al personaje de Keanu Reeves ni a la saga de la que Bailarina es un spin-off.
Por su intensa violencia, y también por sus disparos a la cabeza, que ya se hicieron como una marca registrada de la franquicia.
¿Es tan difícil matar a Eve, asesina tan letal como Wick? Quienes vieron John Wick Capítulo 4 lo sabrán y sin dudas harán sus comparaciones.
La venganza de John Wick, y la de Eve
El motor que moviliza a Bailarina, o a Eve, es la venganza. Ya no es por la muerte de su perro, como le sucedía a Wick -“¿Todo esto por un perro?”, se le escucha por ahí decir a la Directora (Anjelica Huston, con más botox que gestos)- sino por el asesinato del padre de Eve, que no solo es hombres de armas tomar, sino de masacrar a quien se le enfrente y cuidar a los suyos.
De tal palo, tal astilla.
Eve será llevada a la Ruska Roma, conocerá a la Directora y entrenada como bailarina, sí, pero también como asesina.
Y como si Bailarina funciona en la taquilla, va a haber más y más películas con Eve, la primera mitad del filme está centrado en cómo se prepara como arma letal, aunque se caiga una y diez veces en su entrenamiento, o en su primera misión, protegiendo a Katla Park (Choi Soo-young, del grupo coreano Girls’ Generation) de un asesino, sea pateada en unas escaleras o tirada sobre mesas de hielo.
Ya habrá tiempo para rastrear a quien asesinó a su papi.
La aparición de Keanu Reeves
Y también para que aparezca Keanu Reeves.
Es que Bailarina se sitúa entre John Wick 3: Parabellum (2019) y John Wick 4 (2023), donde Wick huía de la Mesa Suprema, todo lo que le permite a Keanu la chance de regresar. Wick aquí tiene una participación pequeña, pero contundente, que obviamente no vamos a develar.
Pero es Baba Yaga…
Y si mencionábamos que no tiene nada que envidiar, es quizá, por lo que el director Chad Stahelski aporta. No, no es el director de Bailarina, al menos en los créditos, función que se le atribuye a Len Wiseman (el de Duro de matar 4.0, donde Stahelski era doble de riesgo: las vueltas de la vida…), pero parece que hubo varias retomas que sí fueron realizadas por Stahelski. Y sí, hay algo que mantiene como un hilo estilístico conductor que atraviesa la saga de Wick y este primer spin-off.
Los fans se preguntarán ¿Eve va en algún momento al Hotel Continental? Va al Hotel Continental. Y no es el único personaje que aparece, porque Winston (Ian McShine) es quien recluta a Eve, y está el manager del Hotel que interpretaba Lance Reddick, muerto prematuramente en la vida real y a quien se dedica la película.
Y como las primeras películas de Wick, no hay necesidad de subtramas ni nada que desvíe la atención al espectador de la trama principal. Aquí hay peleas cada cinco, seis minutos, con lo que sea: armas de fuego, granadas, lanzallamas y Eve es algo así como La novia de Kill Bill: nada podrá detenerla. Y hay varios guiños para los cinéfilos, de Los tres chiflados a Andréi Tarkovski.
De «The Walking Dead» a la saga de John Wick
Lo que sí, Bailarina abre el juego a una secta de asesinos que opera junto a la Alta Mesa, pero por separado, que es controlada por el Canciller (Gabriel Byrne). Norman Reedus, de The Walking Dead, también aparece como Daniel Pine, un objetivo de Eve y con varios contratos pendientes.
Porque si hay algo que se mantiene es lo de los contratos para cobrar si se liquida a alguien.
¿Bailarina revoluciona el universo de John Wick? No, para nada. ¿Aporta algo novedoso? Y sí, un nuevo personaje con fuerza propia, que se verá si sigue el camino de Nikita o de Atómica. Por ahora, más que cumple con su propuesta de matarlos bien muertos.
“Bailarina”
Muy buena
Acción / Thriller. Estados Unidos, 2025. Título original: “Ballerina”. 125’, SAM 16. De: Len Wiseman. Con: Ana de Armas, Keanu Reeves, Ian McShane, Gabriel Byrne, Anjelica Huston. Salas: Hoyts Abasto y Unicenter, Cinemark Palermo, Cinépolis Recoleta y Pilar, Showcase Belgrano y Norcenter.