sábado, 21 de junio de 2025 00:56
Boca se acercó este viernes, en su segunda presentación en el Grupo C del Mundial de Clubes, a sacar un punto clave frente al poderoso Bayern Múnich, pero no lo pudo sostener y terminó cayendo por 2-1 en Miami.
Harry Kane abrió la cuenta para los bávaros, empató Miguel Merentiel con un golazo y Michael Olise con otra gran definición finiquitó el marcador que deja a los de Miguel Russo en una delicada situación para pasar a octavos, obligados a vencer a Auckland y que los bávaros superen a Benfica, remontando diferencia de gol.
La victoria por 6-0 de los lusos contra los oceánicos y la de los alemanes sobre los argentinos reacomodó el panorama del grupo.
Ahora, los bávaros lideran por seis puntos y ya están en la siguiente instancia, mientras que los portugueses escoltan la zona con 4 puntos y una diferencia de +6. El Xeneize está situado en el tercer lugar de su zona con un punto. Por su parte, los neozolandeses quedaron en el fondo de la tabla de posiciones y ya eliminados.
Con este panorama, Boca debe golear por más de siete tantos a Auckland City y esperar que Benfica no empate o gane ante Bayern Múnich. Por ejemplo: si Bayern mete un 4-0 y el Xeneize saca un 3-0, se queda afuera porque las Águilas cuentan con más goles a favor.
¿Qué pasa si el Múnich vence 1-0 y Boca consigue un 6-0? Irán a las estadísticas del Fair Play, donde los de Miguel Russo llevan las de perder porque arrastran dos tarjetas rojas en su haber contra una de su rival directo.
Si los portugueses pierden ante los alemanes y el Xeneize bate a Auckland, igualarán en puntos y todo quedará supeditado a la diferencia de gol.
Es por eso que para Boca es trascendental sumar más diferencia que Benfica en su objetivo de picar el boleto a la siguiente instancia del torneo.