viernes, 4 de julio de 2025 19:00
Después de un prolongado silencio, Jésica Cirio reapareció en la televisión y sorprendió con declaraciones que dejaron en evidencia su frágil estado emocional. La entrevista que brindó en Desayuno Americano mostró una faceta poco habitual de la modelo y conductora, quien reconoció estar atravesando uno de los tramos más duros de su vida, tanto a nivel personal como familiar.
Sin entrar en detalles sobre el conflicto judicial que involucra a su exmarido, detenido desde marzo, Jésica Cirio dejó entrever que la situación afectó profundamente su bienestar. “Estoy mal, por supuesto”, dijo sin rodeos, dejando en claro que su prioridad ahora es su salud mental y su entorno íntimo.
La exposición mediática, que durante años fue parte central de su carrera, hoy se transformó en un peso que prefiere dejar atrás. Según confesó, mantenerse alejada de los medios es una decisión pensada, que busca preservar su estabilidad emocional. “Necesito resguardarme”, expresó, dejando claro que su silencio fue una elección, no una imposición.
En esta etapa de introspección, Jésica Cirio decidió dar un giro rotundo a su vida profesional. Contó que trabaja detrás de cámara para una productora, lejos de los eventos, las luces y los sets de televisión. También adelantó que su futuro laboral podría continuar en el exterior, aunque por ahora prefiere no hacer planes a largo plazo.
En medio del vendaval, la contención familiar se volvió fundamental. Jésica Cirio explicó que su círculo íntimo, reducido pero sólido, es el refugio donde encuentra un poco de paz. También reconoció que decidió alejarse por completo de las redes sociales: “Me hace mal lo que se dice. Ya no quiero leer ni saber”.
El vínculo con el padre de su hija, Martín Insaurralde, fue abordado con cautela. La modelo aclaró que lo respeta por el rol que ocupa en la vida de Chloe, su pequeña hija, pero evitó profundizar sobre ese capítulo de su historia personal.
Respecto a su salida de La Peña de Morfi, Jésica Cirio fue clara: la decisión fue compartida y obedeció a un cambio de prioridades. Hoy busca un rumbo más tranquilo, enfocado en su bienestar, lejos del ritmo acelerado de la televisión.
En un testimonio honesto y sin adornos, Jésica Cirio se mostró vulnerable, pero decidida a proteger lo más valioso que tiene: su salud mental y emocional.