El Ministerio de Capital Humano anunció un aumento del 7,5% para docentes y no docentes de las universidades nacionales que percibirán de manera escalonada entre septiembre y noviembre. La respuesta de los gremios al anuncio del gobierno no tardó en llegar y manifestaron su desacuerdo.
La Federación Argentina del Trabajador de Universidades Nacionales (FATUN) acusó al gobierno de «establecer unilateralmente un aumento», haciendo referencia a que desde que Javier Milei asumió como presidente los sindicatos no fueron convocadas a paritarias. A través de un comunicado manifestó su disconformidad con la propuesta y además explicó que el aumento que se pagará entre septiembre y noviembre en realidad abarca a los salarios percibidos desde el mes de junio y por esa razón con el sueldo de agosto recibirán un aumento del 3.95%.
«FATUN ratifica su disconformidad con la propuesta salarial, manifestando que la misma no logra cubrir la pérdida del poder adquisitivo generada por los índices de inflación publicados por el propio gobierno, donde hoy se conoció que el mes de julio fue de 1,9 %, y los salarios día a día se siguen devaluando sin poder cubrir los gastos básicos», cita el comunicado.
Por su parte, la Federación de Docentes Universitarios (CONADU Histórica) y la Central de Trabajadores Argentinos Autónoma (CTA) publicó un comunicado anunciando que avanzarán con las medidas de fuerza y continuar con el reclamo de un aumento salarial que esté acorde a la inflación.
Además calificaron al bono de $25.000 como «insignificante» y que «no merece ni siquiera mención».
«La contundencia del paro que se despliega en las 57 universidades nacionales, obligó al gobierno a realizar anuncios claramente engañosos», escribieron y convocaron a «toda la comunidad universitaria a sumarse» a su plan de lucha por un salario digno y pidieron el apoyo de la ciudadanía.