La defensa del abogado Nahuel Filippín, quien será juzgado por «abuso sexual con acceso carnal en calidad de partícipe necesario» por un hecho ocurrido en febrero de 2024 junto a Neri Sarmiento Balastegui, quien está imputado como «autor» del mismo delito y llegará a juicio en libertad, pidió aplazar para este martes la audiencia indagatoria que se iba a realizar ayer.
Filippín será juzgado además por «encubrimiento agravado por ánimo de lucro en calidad de coautor», junto a un tercer implicado, Gary García, por recibir sanitarios robados del Predio Ferial en diciembre de 2024; y «hurto simple», por la sustracción de un aparato de un sanatorio de calle Junín. Según la información a la que pudo acceder El Ancasti, el abogado Juan Pablo Morales, a cargo de la defensa técnica de Filippín, presentó un escrito solicitando la postergación de la fecha de audiencia que finalmente se fijó para hoy a la mañana.
Se prevé que el sospechoso será notificado formalmente de la nueva imputación de «desobediencia judicial» por parte de la Fiscalía de Violencia Familiar y de Género, a cargo de Ruth Antonino, para luego ser indagado en presencia del defensor y de la querella, representada por el abogado Sebastián Ibáñez.
Filippín fue arrestado el sábado en jurisdicción de la UJN°7 -en la zona norte de la Capital-, y la fiscalía de instrucción de turno pasó el caso a la fiscalía de Violencia de Género, donde se tramita la imputación más grave (abuso sexual), y demás acusaciones.
«Gracias a Dios tiene pulsera electrónica. Con esta nueva situación deben reintegrarlo al penal porque la Justicia ya debería darse cuenta de que (Nahuel Filippín) es un hombre peligroso. Cualquier otra persona que se intente quitar el dispositivo electrónico seguro que termina preso. Él no puede ser la excepción», advirtieron desde el entorno de la víctima, por la cual será juzgado.
A su vez, la querella remarcó que el hombre «intentó sustraerse de la medida judicial que debía respetar», y adelantó que pedirán que continúe privado de la libertad al menos hasta que sea juzgado. Según los primeros testimonios, el SAE 911 emitió una alerta cuando el dispositivo electrónico de ubicación en tiempo real se activó porque el hombre se lo había sacado, desconectado.
Presuntamente, al momento de la maniobra iba en compañía de una mujer. Con la alarma activada, un grupo de policías se desplazó por avenida Belgrano y poco después encontró el dispositivo dentro de un vehículo.
En el rodado había una mujer, quien de inmediato fue entrevistada por el personal policial. Minutos más tarde llegó Filippín en compañía de un familiar y finalmente fue esposado y trasladado a la Comisaría Séptima, donde quedó alojado a disposición de la fiscalía de turno, que ordenó las primeras medidas y luego remitió el caso a la fiscal Antonino.
Otras fuentes consultadas por este diario consideraron que por la naturaleza y la gravedad de las causas por las cuales fue procesado, y las denuncias que derivaron en otros casos que están en plena investigación, Filippín continuará arrestado. Próximamente se realizará la audiencia de control de detención, por lo que la defensa podría solicitar nuevas pericias psiquiátricas, teniendo en cuenta su condición de consumo problemático de estupefacientes.
