domingo, 4 de mayo de 2025 19:00
Gonzalo Manguera Valenzuela quedó en el centro de la polémica, pero nada tuvo que ver sus relaciones fallidas con las argentinas Juana Viale y Carolina Pampita Ardohain, el chileno esta vez fue más allá y realizó durísimas declaraciones contra Diego Armando Maradona y su emblemático gol a Inglaterra en el Mundial de 1986.
Sus palabras no sólo despertaron indignación en redes sociales, sino que lo posicionaron como tendencia por cuestionar a uno de los ídolos máximos de los argentinos. Durante una entrevista el actor no se guardó nada y disparó con munición gruesa.
“Está todo permitido en la Argentina. Le pusieron la ‘Mano de Dios’ y dejaron a una trampa en un lugar divino. Esa wea es un cáncer social”, declaró, desatando una verdadera tormenta digital. La crítica fue directa al corazón de uno de los momentos más gloriosos del fútbol argentino.
Valenzuela incluso planteó su preocupación como padre: “¿Cómo le explico a mi hijo argentino que hay que respetar las reglas del juego, si el ídolo máximo hace un gol con la mano?”, se quejó, en una comparación que no tardó en generar repudio entre usuarios y figuras del espectáculo.
Pero la polémica no terminó ahí. Lejos de calmar las aguas, Manguera reforzó su postura al alabar al presidente Javier Milei: “Yo creo que, además de la economía, ha hecho un enorme trabajo social”, afirmó, generando sorpresa por su apoyo a un mandatario tan controvertido como disruptivo.
“Milei vino a poner reglas y orden, por eso creo que fue tan votado”, insistió el actor, reforzando la comparación entre el orden que aplaude en la política y la supuesta “viveza criolla” que repudia del gol de Maradona. Como si esto fuera poco, Gonzalo también apuntó contra el expresidente Néstor Kirchner y su esposa, Cristina Fernández.
“Es increíble que el presidente de la República le pase el poder a su mujer y todo el mundo lo aplauda, que nadie diga nada”, sentenció. Las redes sociales no tardaron en estallar. Para muchos, meterse con Maradona es tocar una fibra sagrada. Y Valenzuela lo hizo sin filtros ni reparos. ¿Ignorancia o provocación? Lo cierto es que sus dichos reabren un viejo debate nacional.