El candidato a legislador porteño de La Libertad Avanza (LLA) Manuel Adorni, se impuso en las elecciones legislativas con el 30,02 por ciento de los votos, seguido de cerca por el postulante de Ahora Buenos Aires, Leandro Santoro, con el 27,46 por ciento, y relegando al PRO al tercer lugar con el 15,89, escrutadas el 90,21 por ciento de las mesas.
En cuarto lugar se ubicaba el ex jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta, quien con su lista «Volvamos Buenos Aires» alcanzaba el 8,08 por ciento. Debajo se anotaban el Frente de Izquierda, con Vanina Biasi a la cabeza, con el 3,17%, y el postulante de la UCeDé Ramiro Marra con el 2,61. Más atrás, la Coalición Cívica alcanzó el 2,50%, seguida muy de cerca por la candidata de Evolución Lula Levy, con el 2,31%.
El candidato de Principios y Valores, Alejandro Kim, alcanzaba el 2,03 por ciento. El postulante del MID Ricardo Caruso Lombardi, quien buscaba ser la sorpresa, cosechó el 1,67 por ciento de los sufragios, seguido de cerca por Yamil Santoro, de Unión Porteña Libertaria, con el 0,62 por ciento.
El porcentaje oficial de participación electoral en los comicios legislativos porteños fue del 53,27 por ciento, lo que arroja unos 20 puntos menos que en las elecciones de 2023.
Conocido el triunfo sobre la oferta kirchnerista y sobre la del PRO, el búnker de la Libertad Avanza se convirtió en el centro de la atención. En este sentido, el propio presidente Javier Milei se hizo presente para sumarse a los festejos.
«Hoy es un día bisagra para las ideas de la libertad. Se pintó de violeta el bastión amarillo. Ahora, a pintar de violeta todo el país”, gritó el Presidente. Agradeció al “triángulo de hierro” que conforman el asesor Santiago Caputo y “El Jefe”, Karina Milei, antes de pasarle el micrófono al “gran ganador de la noche”: Manuel Adorni.
“Esta era una elección en la que se elegía entre dos modelos, mal que le pese a muchos que no supieron verla”, afirmó Adorni, en referencia elíptica a Pro. “Entre la decadencia, el pobrismo y el pasado, la gente eligió la libertad”, bramó el portavoz presidencial, ante la mirada del Presidente y su gabinete, subidos todos al escenario.
Decidido a dar un mensaje conciliador, Adorni repitió: “Ahora, tabula rasa. Todo aquel que acompañe nuestra agenda, bienvenido sea”, afirmó, en una clara invitación a los dirigentes macristas a sumarse.
Previamente y apenas se conocieron los primeros resultados, en el búnker del PRO reconocían la derrota. «No son los resultados que esperábamos», admitió la primera postulante del PRO, Sylvia Lospennato, a la hora de reconocer el magro desempeño de la fuerza oficialista de la Ciudad. La candidata estuvo acompañada por el jefe de Gobierno, Jorge Macri y el expresidente, Mauricio Macri.
Santoro por su parte, también festejó aunque no salió primero como decían las encuestas previas. “Hoy se cerró el ciclo del abandono y es importante poner en contexto que el PRO como proyecto político dejó de representar a la mayoría de los porteños. A nosotros nos tocó enfrentar a dos gobiernos en un contexto muy adverso en el que parece que está permitido cualquier cosa”, aseguró.
“Una declaración de principios: si la crueldad se puso de moda, no cuenten con nosotros; entendemos la importancia del resultado de las urnas y también entendemos los principios que llevaron a comprometernos políticamente y esos principios van a orientar nuestra acción política, de ninguna manera vamos a bajar las banderas”, cerró.
Macri se acerca a LLA
Luego de la derrota, el expresidente Mauricio Macri abrió la puerta a una posible alianza con LLA. «Si hay respeto, nosotros estamos dispuestos a ver a dónde vamos», dijo el dirigente en una entrevista luego de conocerse los resultados.
Aseguró que no había hablado con Javier Milei y le contestó al Presidente que hoy lo tildó de “llorón”, luego de votar, al enterarse que Macri había despotricado contra un video falso difundido por cuentas libertarias. “Yo dejo de llorar por las maldades y perversiones de tu entorno si vos dejas de llorar por las cosas que dicen los periodistas y los economistas”, le propuso.