El último jueves, El Ancasti dio a conocer que Rocío Grisel Gordillo había declarado como imputada en la causa de la banda de los usurpadores, que está siendo investigada por el fiscal de Instrucción N° 5, Hugo Costilla. En aquella oportunidad, se dio a conocer parte de su declaración. Al momento de brindar su versión de los hechos ante los investigadores, Gordillo habló sobre la relación laboral y de pareja que tiene con Mario Rodrigo Del Campo, quien está sospechado de liderar la banda. Según Gordillo, el hombre la violentó y era el encargado de manejar las causas ejecutivas en los Juzgados Comerciales y de Ejecución.
“Con Mario Rodrigo Del Campo, cuando yo lo conozco en el año 2021, tenía una relación pura y exclusivamente laboral. Luego, aproximadamente en el año 2023, comenzó una relación, si se puede decir, de pareja, porque prevalecía más lo laboral. Recién en el 2024 comenzamos una relación de pareja formal, sin dejar de hacer mención que tuve idas y vueltas (con Del Campo) debido a que teníamos peleas por estar en desacuerdo en las cuestiones laborales, ya que era muy manipulador con lo laboral y personal. Siempre me sentí acorralada trabajando y estando con él porque nunca se podían hacer las cosas a mi manera. En algunas ocasiones llegó a ejercer violencia física que nunca denuncié por miedo o temor de hacer o decir algo que luego me pudiera perjudicar directa o indirectamente, laboralmente o con mi familia”, aseguró.
La imputada, además, remarcó que tiene conocimiento de que Del Campo “estando peleado conmigo, las causas que yo patrocinaba se mantenían en movimiento, muchas veces yo desconociendo esas situaciones. Él, teniendo un sello de mi persona en su poder, podría haber firmado algún diligenciamiento de causas, sin mi autorización. Inclusive, me decía ‘por más que estemos peleados, yo voy a manejar las causas’”.
Gordillo indicó que ella no manejaba “la parte económica de los juicios ejecutivos” y mencionó que no cobró “dinero alguno” por estos procesos.
Negación
Gordillo contradijo al decreto de determinación del hecho que elaboró Costilla. En su declaración, explicó que en el año 2017, al momento en que se formó la asociación ilícita, de acuerdo con la teoría del fiscal, ella no conocía al resto de los imputados y no tenía ningún vínculo con ellos.
«En algunass ocasiones, llegó a ejercer violencia física que nunca denuncié por miedo»
“Con relación al hecho que se me imputa, niego el mismo, en razón de que en ese año (por el 2017) yo me iniciaba en la profesión de abogada. No tenía conocimiento de todas estas personas, no las conocía, no tenía ningún tipo de vínculo. Cuando se inició mi relación laboral con Rodrigo Del Campo fue en el año 2021, cuando contrata mis servicios jurídicos para llevarle una serie de juicios ejecutivos. No era yo la única que me dedicaba a eso. Éramos varios colegas, entre ellos, estaba María Eugenia Del Campo (hermana de Mario Rodrigo), Matías Gandini, Luis Moya, Javier Alejandro Figueroa, Maximiliano Portero e Iván Sotomayor, que eran los colegas con los que yo trataba por los juicios ejecutivos de Del Campo. Las causas ejecutivas de esos momentos que yo llevaba, los actores eran Inversiones S.R.L., Clara Estela Méndez y Marcela Beatriz Pacheco. Pacheco era la mujer de Del Campo. En ese inicio, en 2021, eran esas nomás. En aquel momento, en la mayoría de todas las causas, yo ingreso como abogada patrocinante. No desde el inicio de la demanda, es decir, ya estaban en algún grado de inicio”, dijo Gordillo.
En otro pasaje, Gordillo se refirió a José Werfil Vega, otro de los imputados que tiene la causa. “En cuanto a la relación con José Werfil Vega, lo conozco porque él estaba cumpliendo una condena en el Penal de Miraflores, a punto de salir, por cuestiones de estupefacientes, y a pedido de su amigo Rodrigo Del Campo, me solicita que lo representara legalmente para las salidas transitorias, laborales.
Es por ello que lo conozco. Con el tiempo, en el año 2023, Vega se me presenta como cliente para que le llevara juicios ejecutivos. Lo representé. Inclusive, me otorgó el poder de los mismos, ante la escribana Graciela Juri de Barranco. Vega me otorgó únicamente un poder general para juicios amplio, el cual no fue firmado en mi presencia, simplemente me lo entregaron”, indicó.