sábado, 12 de julio de 2025 01:49
El crimen de Celeste Judith “Cachi” Moreno, ocurrido en octubre del año 2013, se quedó ayer sin personas detenidas, tras reactivarse el pasado mes de mayo la investigación que llevaba “dormida” casi doce años.
La medida fue dictada ayer por el juez Santiago Ahumada Franzini al emitir la resolución por la audiencia de prisión preventiva, que se llevó a cabo el martes de la semana pasada en la oficina de audiencia de juicio por jurado, a pedido de la fiscal Paola González Pinto.
En aquella oportunidad, la representante de los intereses de la sociedad solicitó la prisión preventiva para Claudio Argañaraz, Ítalo Agüero y “Cacho” Silva, es decir, que permanecieran detenidos en el penal de Miraflores por los próximos 60 días hábiles, periodo que demandarán las pruebas de ADN, una de las piezas claves para la investigación. Además de la prueba de ADN que resta por realizarse y la que podría poner bajo la lupa a otros sindicados, Pinto fundamentó su pedido en las condenas y antecedentes de los implicados, como así también la conducta que adoptaron tras conocer que se había reactivado la investigación judicial.
En esa misma línea, la fiscal le pidió al juez no confirmarle la prisión preventiva a Argentino Nieva, el cuarto imputado, por no contar la instrucción con pruebas firmes para mantenerlo privado de la libertad, aun cuando continúa ligado a la investigación.
En ese mismo orden de ideas alegó el abogado querellante, indicando en el fallo el juez que “solo se limitó a adherirse al pedido de la Fiscalía”.
Por su parte, las defensas de los tres imputados pidieron la inmediata libertad de sus asistidos bajo argumentos varios, coincidiendo en “la falta de prueba para mantenerlos privados de la libertad”.
Fallo
Analizados todos los argumentos de las partes y las pruebas acercadas a la audiencia, el juez Ahumada Franzini resolvió declarar la falta de mérito para los tres imputados y les otorgó la inmediata libertad. A la vez, les fijó una serie de reglas, de conductas que Argañaraz, Agüero y Silva deberán cumplir para no perder el beneficio de la libertad. Entre otras conductas, los mencionados no pueden consumir alcohol u otras sustancias, tampoco pueden acercarse a los familiares de Celeste, a ninguno de los testigos, ni mantener contacto con estos. A la vez, deberán estar disponibles cada vez que la Fiscalía los requiera, como así también deberán presentarse los días lunes en el edificio judicial para firmar en la secretaría de la Fiscalía que los investiga por el supuesto delito de homicidio agravado.
Básicamente, entre las consideraciones que efectuó el fiscal para dictar la falta de mérito está el hecho de que la Fiscalía no probó con el grado de certeza requerido en esta instancia la participación que le endilga a cada uno de los acusados, como tampoco las pruebas sobre las que fundamentaba la privación de la libertad.