sábado, 22 de noviembre de 2025 23:00
Vecinos del Barrio Almirante Brown cortaron este sábado por la noche la Avenida Los Minerales, entre Ángel Segura y la misma arteria principal, para reclamar soluciones urgentes ante la falta de agua que sufren desde hace diez días. La protesta incluyó quema de cubiertas y la intervención de la Policía y Bomberos, quienes se retiraron momentos antes de que los vecinos dieran su testimonio.
Las familias aseguran que el problema no es nuevo: llevan más de 15 años enfrentando cortes diarios, baja presión y la imposibilidad de cargar sus tanques, situación que empeoró de manera crítica en los últimos días.
“Estamos cansados. Hace 27 años que vivimos acá y hace 15 que tenemos problemas con el agua. Ahora ya van 10 días sin una gota y nadie nos atiende. Pagamos todos los meses, pero seguimos igual”, expresó Karina, una de las vecinas.
Según relataron, los reclamos a la empresa Agua de Catamarca no reciben respuestas, y los camiones cisterna enviados por el organismo solo generan más complicaciones.
“Mi hijo se cayó y se golpeó la pierna cuando se subió al tanque para llenarlo. La tapa ya estaba quebrada por los camiones. Yo estoy quemada y tengo que ir a bañarme a Valle Chico para no infectarme”, agregó entre lágrimas.
Los vecinos remarcaron que en el barrio hay personas mayores, pacientes con cáncer, electrodependientes y familias que viven solas, quienes se ven gravemente afectados por la falta del servicio esencial.
Una mujer electrodependiente también expresó su preocupación: “Soy electrodependiente. A veces nos cortan la luz y el agua al mismo tiempo. ¿Por qué tenemos que ir a buscar agua con baldes cuando pagamos todos los meses?”
Los vecinos denuncian que empleados de la empresa cierran llaves y válvulas que dejan al barrio sin suministro.
“Arreglan un día y al otro nos cierran. No es justo. Ya no creemos en nadie. Queremos que venga quien tenga que venir y dé la cara”, reclamaron.
Pese a una obra que realizaron durante la mañana —según los vecinos, tras encontrarse el caño tapado por escombros— el problema persiste, por lo que continuarán con el corte hasta obtener una respuesta concreta.
Desde el lugar, los residentes insistieron: “No vamos a levantar el reclamo. Pedimos empatía. El agua es un derecho y no vamos a esperar a que maten a alguien en un corte para que nos escuchen.”
Los vecinos agradecieron la presencia de los medios y reiteraron que seguirán visibilizando su situación hasta que las autoridades provinciales o de la empresa se hagan presentes en el barrio.
