Se puso en marcha en la Cámara de Diputados el debate sobre cambios en las licencias parentales, un tema que lleva mucho tiempo de reclamos pero hasta ahora no ha avanzado. La discusión comenzó en el marco de un plenario de las comisiones de Legislación del Trabajo y de Mujeres y Diversidad.
El antecedente más reciente, aunque ya hace dos años atrás, se dio en el Senado, cuando en junio de 2021 la Comisión de Trabajo y Previsión Social alcanzó un despacho en común, producto del consenso entre una veintena de proyectos, pero sin embargo nunca se trató en el recinto.
En tanto, en la Cámara baja hay actualmente medio centenar de propuestas presentadas entre 2022 y lo que va de 2023, y la que figura a la cabeza en el temario es la que fue presentada por el Poder Ejecutivo.
El Gobierno envió su proyecto «Cuidar en Igualdad» hace un año atrás, el cual tiene 91 artículos y además de los cambios en las licencias mediante modificaciones en artículos de la Ley de Contrato de Trabajo (20.744) tiene capítulos referidos al «reconocimiento y valoración de los cuidados» y «políticas de redistribución, conciliación y corresponsabilidad», entre otros.
Sin embargo, por lo que se anticipó, para el debate será tomado solo el apartado referido a las licencias de trabajadores registrados, pese a que el ambicioso texto proponía también la inclusión de monotributistas, monotributistas sociales y trabajadores autónomos.
El debate arranca por los trabajadores formales
En el comienzo del primer plenario, la presidenta de la Comisión de Legislación del Trabajo, Vanesa Siley (FdT), reconoció que la discusión sobre la tarea de cuidados «puede ser muy grande y muy infinita, y nunca llegar a resolverse» porque «tenemos distintos universos».
Un proyecto propone equiparar la licencia por adopción a la licencia por maternidad biológica
«Hemos decidido comenzar por uno, no significando esto que se vaya a dejar de lado el resto de las discusiones, sino que metodológicamente y por técnica legislativa necesitamos comenzar por partes», aclaró. De esta manera, precisó que se abordarán las iniciativas «que refieren a licencias y que tocan normativas existentes como Ley de Contrato de Trabajo, la Ley de Asignaciones Familiares, la 24.241 del Sistema Previsional Integrado Argentino, y otras leyes especiales que no están contenidas en la LCT, como la Ley de Trabajadoras de Casas Particulares y Ley del Trabajo Agrario».
A continuación, la presidenta de la Comisión de Mujeres y Diversidad, Mónica Macha (FdT), garantizó que en «simultáneo» buscarán abrir el debate en asesores sobre «el otro cúmulo de proyectos que tienen que ver con cuidadoras comunitarias y domiciliarias, tanto monotributistas como cooperativas».
«Hoy vamos a estar trabajando la situación de las personas que están en un contexto de trabajo formal y, del otro modo, vamos a trabajar y generar instancias para que esas personas que dedican mucho tiempo a esta tarea que es parte de su modo de ganarse la vida también puedan ir adquiriendo instancias de trabajo formal», expresó.
Durante el plenario, en el que la mayoría de las presentes fueron diputadas, la bonaerense Karina Banfi (UCR) se refirió a su proyecto que propone equiparar la licencia por adopción a la licencia por maternidad biológica, el cual presentó en tres oportunidades. «Esta licencia es principalmente necesaria para el niño que se lo incluye en el nuevo estadio familiar y todo ese tiempo es extremadamente valioso», sostuvo.
Por su parte, la diputada Myriam Bregman (PTS-FIT) preguntó «qué compromiso van a poner las fuerzas mayoritarias en este debate» ya que «la derecha de Juntos por el Cambio está proponiendo una reforma laboral: ¿cómo se compatibiliza con esto? Porque esto va a tener un costo para las empresas y queremos que tenga un costo».
«Tenemos que aclarar cuál va a ser la agenda y hasta dónde estamos dispuestos a llegar, porque en un país regido por la bota del FMI tenemos que ser claros», advirtió.
La diputada Myriam Bregman (PTS-FIT) preguntó qué compromiso van a poner las fuerzas mayoritarias en este debate
Otras de las oradoras fue la legisladora Silvia Lospennato (Pro), quien apuntó que «claramente el problema con las licencias no lo tienen las que tienen 90 días, sino quienes tienen 0 días, las monotributistas, las autónomas, las informales… Pero por un lado hay que empezar y esto también es una deuda que la venimos pateando, y me parece que, si ahora hay vocación de trabajar de manera racional y acotada en una reforma que va a incorporar mucho de lo que ya existe en convenios, en empleo público en muchos municipios y provincias y dependencias del Estado, es de alguna manera un primer paso que necesitamos hacer», destacó.
Licencia por paternidad, una de las más bajas del mundo
Entre los cambios más significativos, el texto girado por el Ejecutivo propone extender la licencia para las mujeres y personas gestantes de 90 a 126 días, mientras que extiende la licencia por paternidad o para personas no gestantes de 2 días a 90 días, de manera escalonada desde la entrada en vigencia de la ley hasta ocho años después.
Sobre este aspecto, en diálogo con iProfesional, el diputado nacional Hugo Yasky (FdT) aseguró que «es importante que el hombre se incorpore a las tareas de cuidado a la par de la mujer porque la mujer ya se incorporó al mundo laboral a la par del hombre». Para el oficialista, la disparidad existente genera «un vacío en el entorno familiar» y «una ausencia en cuanto a quienes asumen las tareas de cuidado», que se promueven -justamente- sean igualitarias.
El legislador de extracción sindical resaltó que «en la mayor parte de los países del mundo, el nacimiento del hijo determina para el hombre una licencia que oscila entre los tres meses y el año», mientras que «en Argentina todavía tenemos una licencia de dos días, que se extiende en caso de gravedad a tres». Y sostuvo: «Es una aberración que nos pone en la prehistoria».
Más allá de otras licencias que se contemplan, Yasky consideró que «este es un ejemplo concreto de la necesidad acuciante de que las licencias parentales sean incorporadas como lo han hecho los países de Europa y la mayoría de América Latina».
«Es importante que podamos empezar a tratar y avanzar en el transcurso de este año», concluyó.
Un cambio es extender la licencia para las mujeres y personas gestantes de 90 a 126 días
Licencias por adopción, fertilización asistida y violencia de género
Además, en el proyecto oficial se prevé la licencia por adopción de 2 a 12 días por año para quienes estén por adoptar; y en caso de concretarse la adopción, será de 90 días. Otro de los artículos determina que en caso de nacimiento o adopción de hijo/a con discapacidad o con enfermedad crónica, la licencia se extenderá por el plazo de 180 días.
También, el texto impulsado desde Casa Rosada crea la licencia de 2 a 6 días para cuidar o acompañar al cónyuge o conviviente que realiza técnicas de reproducción asistida, y la extiende de 3 a 10 días en el caso que tuviese hijos/as menores de edad a cargo.
Entre otros cambios, figura la ampliación de la licencia por fallecimiento de cónyuge o conviviente, y por hijo de 3 a 5 días; la ampliación de la licencia por fallecimiento de hermano de 1 a 3 días; la creación de una licencia especial para cuidado por enfermedad de persona a cargo, conviviente o cónyuge de 2 días a un máximo de 20 días por año; y la creación de la licencia por violencia de género, de hasta un máximo de 20 días por año.
El temario que abordarán las comisiones contiene 52 proyectos en total, presentados por diputados de diferentes bloques, entre ellos Soledad Carrizo (UCR), Estela Hernández (FdT), Romina del Plá (FIT), Claudia Ormachea (FdT), Myriam Bregman (FIT), Alejandra Obeid (FdT), Silvana Ginocchio (FdT) y Graciela Camaño (IF-IB).
Hay algunos, como el que lleva la firma de Tanya Bertoldi (FdT), que propone una licencia anual especial para la realización de estudios preventivos del cáncer de mama y cérvico uterino, otro de Alicia Aparicio (FdT) sobre licencia para el acompañamiento de personas en alto riesgo de suicidio, y uno de Cristian Ritondo (Pro) para trabajadores con hijos diagnosticados con cáncer.
Según datos del INDEC, «en Argentina las mujeres dedican 5,7 horas de tiempo social promedio por día al trabajo de cuidados no remunerado y los varones dedican en promedio solo 2 horas diarias», mientras que «esta distribución desigual de las tareas de cuidado impacta en la vida de las mujeres disminuyendo la cantidad de tiempo disponible para dedicar a su desarrollo laboral o personal».